Por Ivan Gomez
El festival de Purim es una celebración judía que conmemora la salvación del pueblo judío en el antiguo imperio persa, tal como se relata en el libro de Ester. Según la historia, Hamán, el primer ministro del rey Asuero (también conocido como Jerjes I de Persia), planeó exterminar a todos los judíos del imperio. Sin embargo, su plan fue frustrado por Ester, la reina judía, y su primo Mardoqueo, quienes lograron que el rey emitiera un nuevo edicto permitiendo a los judíos defenderse y destruir a sus enemigos. El 14 de Adar, los judíos celebran su victoria y la reversión de su suerte con alegría y festividad.
Purim es conocido por su atmósfera carnavalesca, donde la alegría y la celebración toman las calles y sinagogas. Entre las tradiciones de Purim, se encuentran:
Lectura de la Meguilá (rollo de Ester): Se lee públicamente el libro de Ester en la noche y la mañana de Purim para recontar la historia de la salvación de los judíos. Durante la lectura, es común hacer ruido con matracas (graggers) cada vez que se menciona el nombre de Hamán, para “borrar” su memoria.
Enviar Mishloach Manot: Se envían regalos de alimentos y bebidas a amigos y familiares. Estos paquetes suelen incluir al menos dos tipos de alimentos listos para consumir, como dulces y frutas.
Donaciones a los pobres (Matanot La’Evyonim): Purim es un tiempo para compartir con aquellos que tienen menos, cumpliendo con el mandato de dar caridad a al menos dos personas necesitadas.
Fiesta de Purim (Seudat Purim): Se celebra una comida festiva durante el día de Purim, donde se disfruta de comidas y bebidas, incluyendo el tradicional vino de Purim. Es un mandato estar alegre, y muchos aprovechan para disfrutar en compañía de amigos y familiares.
Disfraces: En Purim, niños y adultos se disfrazan, una tradición que refleja los temas de ocultamiento y revelación presentes en la historia de Ester. Esta costumbre también simboliza cómo las apariencias pueden ser engañosas, y cómo la intervención divina a menudo está oculta, no revelada de manera abierta.
A través de estas tradiciones, Purim resalta la importancia de la comunidad, la solidaridad, el valor de enfrentarse a la adversidad y la convicción de que, incluso en los momentos más oscuros, puede surgir la esperanza y la salvación. Purim enseña que la alegría y la felicidad pueden ser actos de resistencia espiritual y fuentes de renovación y fortaleza.